En nuestro artículo “Modelo Ganadero” mencionamos que la “Terneza” es el principal atributo de una carne Premium (partiendo de la base que cumple con los estándares de higiene y salubridad), y que es posible alcanzarla mediante el beneficio de animales jóvenes. Por lo tanto, debíamos buscar una curva de crecimiento que nos permitiera alcanzar un animal joven con la cantidad de músculo y grado de engrasamiento adecuado.
Y la curva de crecimiento del animal se encuentra directamente relacionada a la calidad del alimento y a la estructura de la dieta en cada etapa de la vida.
La estructura de la “Dieta” debe aportar las proteínas, carbohidratos y minerales necesarios en cantidad y calidad para que se pueda alcanzar la tipología de res objetivo, necesaria como primer elemento para obtener una carne de calidad Premium.
En este punto comienza el análisis de las materias primas disponibles durante todo el año para conformar la dieta alimenticia.
En el caso de las materias primas, tenemos una primera clasificación en “Forrajes”, “Cereales” y Oleaginosos”. Y Dentro de esta clasificación, hay que analizar que “Tipología” de cada uno de ellos disponemos, y la calidad de los mismos. Es decir, que porcentaje aportan de proteínas, minerales, carbohidratos, cenizas, etc.
Otro aspecto importante, era conocer las características del recurso hídrico con que se cuenta para ver el grado de calidad del agua, para conocer si la misma se adecúa a los requerimientos nutricionales.
Teniendo los análisis de las materias primas disponibles, conociendo las características del agua y teniendo en cuenta el contexto: Temperaturas medias anuales, amplitud diaria de la temperatura, régimen de lluvias, etc. se procedió al diseño de la dieta que nos permitiera alcanzar los objetivos de “Calidad de Res” que nos provea la “Terneza” objetivo.
Se encuentra totalmente demostrado que una dieta conformada por forrajes y granos permite un crecimiento más rápido del animal, y por ende nos aporta una carne más tierna, que un animal alimentado solo por forrajes.
Otro elemento a tener en cuenta en la alimentación de los animales, es utilizar insumos que no se encuentren prohibidos para su uso. Por ello, Fundo Noemiro no utiliza “La Gallinaza” en la alimentación de sus animales.
Se llama Gallinaza a los excrementos de los pollos y gallinas. Por su alto valor nutritivo y su bajo costo es común su uso en la alimentación de los bovinos. Pero por los riesgos que implica a la salud de las personas, “El Código Alimentario del Perú” (Como del resto de los países) ha prohibido el uso de la Gallinaza sin tratar como alimento de los rumiantes.
Los granos en la dieta, deben aportar los nutrientes que le faltan al forraje. A fin de lograr estandarizar el proceso de cría y engorde, es necesario poder estandarizar la dieta. Y para ello, resulta fundamental tener insumos en calidad estables todo el año. Bajo esta premisa es que en Fundo Noemiro producimos el forraje que utilizamos en la alimentación de nuestro ganado, para de esta manera contar todo el año con la misma calidad de forraje.
En resumen, Fundo Noemiro brinda a sus animales una dieta equilibrada entre forrajes y granos, con la cual le permite alcanzar los objetivos de calidad de res que nos provea una carne tierna, cuidando todos y cada uno de los aspectos de salubridad.
Continuamos trabajando para que puedan seguir disfrutando de un buen corte de carne Fundo Noemiro, y les mando un fuerte abrazo.
Hasta la próxima entrega.
Reinaldo
