Iniciamos el año 2022 con mucha ilusión y muchos proyectos, ya que la etapa de la pandemia quedaba atrás, y cuando parecía que podíamos ordenar nuestras vidas y nuestros negocios, y volver a la época pre-pandemia, nos encontramos con la guerra entre Rusia y Ucrania.
Lo que en un primer momento, parecía ser algo relámpago, terminó perpetuándose en el tiempo, y se extendió todo el año 2022 y continúa hasta ahora…
La guerra tuvo consecuencias económicas muy fuertes para el mundo: Suba del precio del petróleo; suba del precio de las materias primas (maíz; soja; trigo); escasez de insumos básicos para la agricultura, como herbicidas, fertilizantes, urea, incremento del precio del transporte internacional, incremento de los costos de la energía; etc.
El incremento del precio de los insumos de origen graniferos y oleaginosos, impactó de lleno en la producción de carne (Res, Pollo; Cerdo); de leche, y demás industrias que tienen a estas materias primas como principal insumo.
Si a la suma de los precios de las materias primas básicas, le agregamos la suba y escasez de los insumos para la agricultura, nos encontramos ante una situación muy delicada para la producción primaria.
Esta situación que no resulta gratis para nadie, requiere de las empresas de mucho trabajo; esfuerzo; ajuste de costos; mejora de productividad y de eficiencia en cada etapa del negocio, para poder hacer frente a estos desajustes macro y no perecer ante ello.
Como no sabíamos (y no sabemos) lo que puede llegar a durar esta situación; en Fundo Noemiro, nos propusimos enfrentarla con todos los recursos con que contamos (humanos; técnicos; financieros), redoblando nuestros esfuerzos; sin renunciar a nuestros objetivos de crecimiento, manteniendo nuestras normas de “Calidad y Excelencia”.
Dentro de este marco de trabajo; se inscriben los procesos de capacitación a nuestra gente; inversiones en las áreas productivas (campo e industria); inicio y avance de un proceso de certificación en el área industrial; desarrollo y lanzamiento de nuevos productos; entre otros.
Hoy, ya terminado el año 2022, y con unas cuantas gotas de sudor sobre nuestra frente, nos permitimos compartir con ustedes, la satisfacción de saber que los esfuerzos realizados han tenido sus frutos, ya que cerramos este ejercicio, con un importante crecimiento en relación con el año anterior. Situación que se repite año tras año.
También nos enorgullece compartir, que los productos Fundo Noemiro, además de comercializarse en la ciudad de Arequipa, llegan a diferentes ciudades del Perú, tales como: Lima; Tacna; Cusco; Talara; Chiclayo; Ayacucho; Ica; Moquegua; Cajamarca; Islay; Ilo; San Román; Trujillo; Puno; Puerto Maldonado; Moyabamba.
Por todo ello, queremos decirles que en este año que se inicia, seguiremos trabajando duro, y poniendo todo lo mejor de nosotros para seguir cumpliendo nuestros sueños y por sobre todas las cosas, que cada vez más habitantes de este querido y hermoso país, puedan tener la posibilidad de disfrutar de un producto Fundo Noemiro.
Levantando la copa, deseándoles que tengan un muy buen 2023, y esperando que nos sigan acompañando, les envío un fuerte abrazo.
Hasta la próxima entrega
Reinaldo
